Una noche cualquiera me acuerdo de ti. Te saco de la bolsa y te miro. ¿Recuerdas cuantos días hacía que no estabas en mis manos?, Ponme un objetivo y vamos a chalar, me dices en silencio sin pensarlo dos veces.
Ummm, vamos con el tele. Extraigo de su estuche el 70/200 F 2.8 y te lo coloco. Instantáneamente cobráis vida los dos y me doy cuenta de lo que nos estábamos necesitando los tres.
Dicho y echo, a estas horas ya no queda casi nadie en la calle, pero nosotros vamos acaparando imágenes, una a una, tres a tres. El tiempo ha pasado rápido, unas horas después os vuelvo a recoger en vuestros estuches, mañana estaremos otra vez juntos.
Ya se me ocurrirá algo.
Hasta mañana
No hay comentarios:
Publicar un comentario