jueves, 1 de agosto de 2013

Ya desde pequeño

Ya desde pequeño tenia gran habilidad en aislarme y soñar despierto. Primero fué imaginar el resto de mi vida, lo que llegaría a ser, la persona o personas que estarían a mi lado. Me imaginaba resolviendo problemas, asumiendo responsabilidades.

Después la vida me fue enseñando que las personas somos lo que las circunstancias y la misma vida nos obligan. Aquellos sueños me despiertan ahora la nostalgia de un mundo que en aquel momento para mí fué terrible y que ahora, visto desde el transcurrir de los años se me antoja maravilloso.

Aquel soñador empedernido que tenia la maravillosa facultad de soñar despierto, que se imaginaba como tendría rendida a sus pies a la mujer que amara, que se veía a cargo de todo y resolviendo todo, ahora, al cumplir medio centenar de años le asusta mirar hacia atrás y pararse a pensar que ha podido defraudar al niño de su infancia.

Sé que todos nosotros buscamos tarde o temprano a ese niño que conservamos en nuestro interior, pero hoy el notar su presencia dentro de mi me incomoda. Se que él podría preguntarme por aquellos sueños de juventud y también sé que yo no sabría qué contestarle.

Me da tanto miedo defraudarlo que por ello invento absurdas excusas sobre las circunstancias de la vida que me han obligado a estar donde estoy, pero sé que no le puedo engañar y que nunca le podré ocultar mi más pequeño secreto, mi vida…



3 comentarios:

  1. Me acabas de dejar con la boca abierta, me han emocionada tus palabras no sabes cuanto,te podías dedicar a escribir. Con lágrimas en los ojos te felicito y no dejes de escribir estas entradas tan bonitas y emotivas.FELICIDADES.

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  2. Como bien dices Rafa, las circunstancias de la vida nos hacen cambiar, o mejor dicho adaptarnos, aunque eso conlleva en la gran mayoría de casos traicionarnos a nosotros mismos, algo que a la postre nos acostumbramos..., nos mentimos y como bien dices, nos inventamos excusas para no sentir algo de vergüenza, pero siempre hay que ver las cosas desde el lado positivo, y es que inevitáblemente los tiempos pasados siempre fueron mejores, pero no volverán...

    Saludos, y enhorabuena por la entrada.

    MA

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