Si hay un momento que me encanta fotografiar cada Renaixement es el tiempo de concentración de los participantes en el Parc de Tortosa antes de la Desfilada final. Como cada año aprovecho para captar las imágenes que realmente me gustan.
Es el mejor momento para los robados y para esos posados que desde mi cámara modúlo a mi estilo personal.
Prácticamente todos los participantes buscan mi atención y después mi objetivo, es, sencillamente, una verdadera gozada. Después, cuando rescato esas imágenes, y bajo una intensa música de Jazz, disfruto al editarlas casi o más que cuando las he realizado.
Ese es un secreto que hasta hoy no había compartido, por eso dejo estas imágenes siempre para el final.
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