En la comarca de la Terra Alta, núcleo duro de la Batalla del Ebro y donde, aún hoy, hay muestras evidentes del sufrimiento de sus habitantes, uno de los rincones de visita obligada es el Pueblo Viejo de Corbera d'Ebre que esta situado en lo alto del cerro de la Montera.
Antes de que estallara la guerra, el pueblo de Corbera era uno de los más importantes de la comarca, con una población de más de 2.000 habitantes, pero un buen día llegó el ejército republicano y más tarde, el franquista, y el pueblo se encontro en medio de una de las batallas más duras y largas de la Guerra Civil. El resultado de todo ello fue que Corbera quedó devastada y perdió hasta un tercio de su población. La poca gente que aún quedaba y los que fueron volviendo comenzaron a construir sus nuevas casas en la parte baja del cerro y poco a poco el pueblo viejo quedó deshabitado.
Aunque pareezca imposible una vez que has visitado el pueblo, los últimos habitantes en abandonarlo lo hicieron en el año 2008.
Esta herida de guerra aún está muy presente en un pueblo de poco más de 1.000 habitantes, que no puede ni quiere olvidar lo ocurrido y que su deseo es tenerlo fresco en la memoria para que nunca más vuelva a pasar, es por ello que el Pueblo Viejo se ha convertido en un monumento a la Paz.
Para visitar el Pueblo Viejo sólo tenéis que ir a Corbera d'Ebre y subir hasta lo alto del pueblo. Una vez allí ya os encontrais en el Pueblo Viejo y sólo tenéis que perderos por las calles e intentar imaginar que aquello, no hace tanto tiempo, era un pueblo lleno de vida.
Unas pequeñas pineceladas del pueblo nuevo
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